Allí contigo

Soy tan diferente
Y por suerte tan callado
Soy tan paciente
Que si algún día te lo digo
Te quedarás petrificado:
En mi infancia fui a la escuela
Mi juventud allí estudiando
Yo recuerdo su huella
Que hoy te estoy contando,
Allí había días
Que el trabajo era ausente
Y había también días
Que disfrutábamos de la gente,
Así aprovechamos el ruido
De tantas miradas culpadoras
Y nos acercamos al río
A apartarnos y otras cosas,
Tú cogiste mi mano
Yo tu pelo,
Tú me diste un beso
Y yo te contesté luego,
Es cierto eso que dicen
Que no hay nada mejor
Que la infancia de uno mismo
Allí con todo su esplendor,
Tú sonreías con nerviosismo
Recuerdo haber hablado
De las vueltas de la vida
Y todo lo que nos había pasado,
Pero ¿qué sabíamos nosotros
De todo lo que se nos acercaba?
Un mañana infame
Y un destino que nunca acaba,
Si hoy pudiese yo volver
No querría regresar
Porque no recuerdo momento más feliz
Que contigo era estar.

A la muerte del maestro Francisco

Caen lágrimas del cielo
Que no sirven de consuelo
Por la falta de un referente
Y un buen compañero,
Hoy perdimos el sabor
Del sonido más bonito
Yo estoy con ella
Y me siento correspondido,
Pero ya todo es silencio
Ha llegado el más triste final
Yo no quiero ya olvidarle
Al maestro del recuerdo
Que me guía en mi carrera,
Querido maestro,
Hoy rindo homenaje
Como cuando te conocí
Y quise ser domador de textos
Aprendiz de la virtud
Hoy quiero escuchar tu música
Y llegar a ser como tú,
No he cedido desde que empecé
Y tú sabes que alguno cesó
Pero yo te represento
Y continuo en el camino
Que usted mismo me enseñó;
Le cuento a mis hijos
Que un día tú exististe
Oyendo tus cuerdas silenciadas
Yo también sé que suena triste,
Pero viviste para enseñarnos
Y nos dejaste huella
Nos encendiste el camino
Gracias maestro
Por tu apoyo infinito.

Hace historia

Bajo la presión de un nuevo día
Camino aún dormido
Pero consciente del próximo paso
Mientras doblo la esquina
Evitando el frío raso,
Camino entre ideas e ilusión
Con la marca imbatible
Que esconde una nueva intención,
Soy alguien imprevisible;
Entre unos buenos resúmenes
Camino con silencios
Interrumpidos por los crímenes
Que silencian otros vientos,
Y evitando turbulencias
Sigo mi camino
Entre una época de escasez
Y el hambre de un nuevo amigo,
Soy distante entre palabras
Y quizá por eso camino callado
Pero así disfruto más
Del calor de mi bolsillo,
Suena una melodía a mis espaldas
Y con el cañón armado
Pienso en las balas
Mejor que estar a un lado,
Yo creo las leyes
Yo hago que obedezcas
Si pruebas mi sabor
Haré que en mis brazos te mezcas...

Enana

Aún hay un camino
Que nunca he caminado
Aún queda un amor
Del que nunca me he enamorado,
Así de paradójico es
Lo que aún me queda por ver
Entre tanta alma perdida
Yo me lo empiezo a creer,
Hay quien no da un peso
Quien no confía en el tema
Y es que yo doy un beso
Y lleno cada vena,
Caminamos entre la perdición
El orgullo que nos trajo aquí
Si muero por dolor del corazón
Que sea pensando en ti,
Ya eres tú
Mi sueño más tenido
Mi amor más reñido
Eres tú el beso perdido,
Leo entre mis líneas
Que tú exististe algún día
Y que un abrazado tuyo
Hizo amanecer los siguientes días,
Muy bonita la escena
Mi imaginación
Qué preciosa la estela
Que te separa de mi corazón,
Siento cómo te tengo
Siento también cómo te pierdes
Hoy creo imaginar el dolor
Si algún día te fueses.

Venga, vamos ya

Un insulto y un temor
Algunos miedos,
Unas cuentas mal hechas
Y por supuesto algunos ceros,
No hay peros en la lucha sin cuartel
Ya que hay una herida
Imperdonable en cada vida,
Cuando el respeto se pierde
Y brota la rabia contenida
Cuando el odio que hierve
Cabalga sin medida,
Aún queda terreno por ganar
Y más de lo mismo
Que conquistar
Hoy siento la indecencia
Del país que tengo que habitar,
Sigo viendo lo mismo que veía
Aquello que tanto me dolía
Y hoy agudiza mi dolor
La edad de mis días,
Ya no hay perdón,
Sacando las garras
Y desenvainando la espada
Me preparo para las luchas
Que viajarán a mi espalda,
Tú que me lees y yo que te escribo
Echa mano de tu arma
Y embárcate conmigo
Viajemos en mi alma,
Ya no queda ni el más glamuroso
De los edificios de nuestra ciudad
Quizá fue su envidia
Lo que nos destrozaba sin piedad;
Pero ya siento la llamada
Un grito desde el cielo
Algo que me empuja
Y me da la fuerza del guerrero,
Soy sincero, cuento contigo.

Por ti, por mí

Exijo unas leyes
Para poder seguir
Una serie de normas
Que a todos obligo a cumplir,
Yo no me conformo con respirar
Ni solo con vivir
Así que estoy por pensar
Que vivo para existir,
No me gusta el exceso
Que otro de aproveche, no es eso
Busco la coalición
Entre tú y yo y mi corazón,
Entenderás lo que explico
Querido lector mío
Que hay una razón que te invito
A reflexionar entre versos
Lo que aquí dejo escrito,
Y es que el amor
Ya estaba muy visto
Yo me decanto por el respeto
Para saber que mi trabajo
Sé hacerlo o por lo menos sé aprenderlo,
Así de simple,
Va y viene mi sonrisa
Siempre viene cuando no hay prisa
Y si tú entiendes mis errores
Soy yo quien se queda
Con tus temores al viento;
Abrazado siempre contigo
Aunque hay momentos en lo que prefiero
Sinceramente no haver vivido,
¿Hay desprecio?

Cuando todo va bien

O quizá solo sea un engaño
Un pequeño artificio que oculte
Otras cosas de antaño,
Problemas mayores,
Problemas de tiempo
O quizá de ausencia
Nunca supe cómo aprender
A respetar mi paciencia,
No entiendo lo que hacemos
Tú y yo luchamos
Por algo que no creemos,
Ya me había visto
Muchas veces en el imprevisto
Y aunque no soy tan listo
Zafé de la catástrofe
Dejando bien alto el listón;
Me gustaría poder decir
Que todo va según lo planeado
Pero a la verdad decir
Estoy un poco decepcionado,
Estoy, y me preocupa
Saber quién soy
Y alma que me ocupa
No sé si es un fracaso
O todo es victoria
Ya no sé si volverá
Mi antigua y amada gloria.

En mi soledad

Sigo buscando un orden
En contraposición al desconcierto
Sigo buscando las cosas
En el sitio equivocado,
Levanto una y otra
Cada vez más aprisa
Ya casi no recuerdo que busco
Pero sigo revolviendo en mi sonrisa,
En mi armario quedan recuerdos
Alguna tarde contigo...
Aún pienso en ti
Y me siento perdido,
Llevaba una hoja
Como siempre cuadriculada
Y caminaba distanciado
Detrás de ti y con cuidado,
Me detenía en cada portal
A escribir versos como este
Pensando en el futuro
Y volver a tenerte,
Pero tú corrías y avanzabas
Mucho más rápido que yo
Y acabaste por perderme
En un tremendo rebumbio,
Yo te buscaba entre la gente
(Ignorante de mí)
Solo quería verte enfrente
(Sin saber que no querías volver a mí),
Con el paso del tiempo entendí
Que no fue un descuido
Sino la estrategia preparada
Para tirarme en tu olvido;
Que el tiempo ejerza justicia
Y no hagas confundir a nadie
Tu amor con la delicia.

Entre otros tiempos

Ahora que el tiempo me hace viejo
Y las horas pasan rápido
La vida ya no me tiene el respeto que merezco,
Espero sentado
A que venga mi final
Y con gesto cansando
Un poco pensativo y un tanto derrotado
Acepto haber sido un soñador
Un humilde caballero
Al que la imaginación dejó
A las puertas del cielo,
Ya no tengo la fuerza en mi cuerpo
El talento en mi cabeza
Ni un gentil paso, ya ni destreza,
Ahora me miro al espejo
Y acepto mi destino
Ya nada me devolverá al sitio
Donde yo fui un niño,
Mis ojos casi no ven
Mi boca o mi poesía
Ya no están en el Edén
Si alguien no recuerda mis hazañas
¡Que les den!
Mi nombre tuvo mucho significado
Antes de vida alegre
Y el trabajo mejor clasificado
Y ahora es diferente
Más bien todo lo contrario
Ahora solo significa
Haber perdido el título mejor valorado;
Recuerdo cuando estuve
En los círculos de aquella alta burguesía
Lo mejor de cada casa
Que allí se reunía
Y yo entré con méritos propios
De la mano de mi poesía
Un poco de valor
Y alguna argucia mía,
Ya nada me sirve y a decir verdad
De los que allí estábamos
Ya no queda nadie en esa realidad.

Compartiré mis momentos

Nadie responde mis preguntas
Un silencio que nos une
Y unas palabras creadas
Para ver ver si te juntas,
Pareces tú nacida
En un país allá muy lejano
Y quizá por eso no entiendas mis palabras
O no quieras escucharlas,
Mientras yo escribo mi corazón late
Si en algún encuentro furtivo te esquivo
Será porque no tengo tu llave,
Sigo habitando bosques malditos
Sigo trepando árboles
Algunas veces oigo gritos
Y en ocasiones tallo mármoles
Con mi nombre allí plasmado
Con mi recuerdo allí olvidado
Hoy no me salen las cuentas
Ni recuerdo que tú me hayas amado;
Algún día me pedirá perdón
Pero que hable el más fuerte
O aquel que nunca tuvo razón,
Tanto tiempo pensando en ti, soy así
Y cuanto más pienso
Menos quiero pensar
Y cuanto más te añoro
Menos te quiero añorar.

Desde aquel día

Habrás cosas a las que nunca renuncie
Si bien es cierto que hoy amanece
Pero mañana el cielo se tercie
Color negro de muerte
Yo siempre te querré
Y por siempre viviré,
Dedicándote una y otra
Mi poesía, mis palabras
Son las armas del profeta
Para enmiendar mis amores,
Yo sé que tú hablarás algún día
Quizá sea hoy
Quizá el río vaya a la ría
Y comprendiendo el camino de la vida
Hoy me esfuerzo en mi poesía;
Pongo sobre la mesa tu valor
Y entre mis palabras carcomidas
Su uso extenuado en estas tríadas
Hoy le cuento al mundo
Que pasaste por nuestras vidas,
Y a mí me marcaste,
Con tu pisada y tus manos
Con tu mirada nos cruzamos
Tú y yo tan juntos
A ver si algún día nos quedamos
A dormir en el mundo de los sueños
A vivir desde que éramos pequeños
A reír los buenos momentos
Que en mis letras yo te narro,
Y te cuento que un día
Me enamoré de ti.

Helaida, por mi olvido

Sería un engaño no aceptarlo
Hoy juego mis mejores bazas
Aún sabiendo que no podré cambiarlo, soy así,
La consecuencia ya no importa
Ya da igual haber fracaso
¿Quién te va a preguntar el resultado
Lo hará tu asesino acaso?
¿O ya nisiquiera crees estar muerto?
Entonces ven y dime
¿Por qué lo has hecho?
No podrías decir más que mentiras
Y aunque yo, enamorado, te creyese
Seguirías siendo tan mala
Como el diablo que me tentó a creerte,
Vivo, tan solo, con el recuerdo de tu existencia
Y por mucho que intento olvidarte
Hay quien me recuerda
Que no valió la pena hablarte,
¿Dónde estás?

Perdido en lo ínfimo

Un intento tras otro
Y ya van cien vidas
Un fallo tras otro
Y ya son mil heridas,
Hay un desastre en mi alma
En un entorno empodrecido
Por un argumento falso
Y un corazón partido,
¿Quién me mira
Y quién me esquiva?
Ya no sé quién va de mi lado
Y quien sonríe al verme caer,
Son cientos ya de momentos
Algunos tan inolvidables
Como cuando viajábamos en los vientos
Y yo te miraba con una sonrisa
¡Qué bellos aquellos tiempos!
Sigo cavando en tu busca
Sigo oyendo tus gritos
Me pides auxilio
Mientras tú oyes los míos,
Yo sigo sudando por ti
Cada vez más preocupado
Pero sigo buscándote
Para que te quedes a mi lado;
Cuando tú me encuentres,
Cuando yo te abrace,
Cuando por fin estemos juntos
Yo seré el más feliz
De entre todos estos mundos.

Mirándonos

No recuerdo ningún momento
En el que tú no me hayas deleitado
Con la poesía de tus ojos
Mientras yo te escucho anonadado,
Leo tus versos más preciosos
Y pienso que quizá algún día
Llegues a decirme
Lo que me escribes en tu poesía,
Fuimos hermanos separados al nacer
Un suspiro o un calmante
Ambos somos iguales
Pero no lo queremos reconocer,
Tu eres la caricia más tranquila
Y yo la pasión más oculta
Que retransmite cuando te mira,
Soy capaz de cruzar el mar
Dejar de soñar
Si tú me pides llamo a tu puerta
Y te obligo a contestar,
Llevo cien mil versos pensando
Buscando la esencia del olor
Y aún no he visto ninguno
Que demuestre tan bien mi amor,
Quizá yo sea la versión de Romeo
La cara más avergonzada del rechazo
Pero si un día amanecí pensando en ti
Que Cupido me regale otro flechazo.