Veo el paso del tiempo
Con los mismos ojos que vieron mi juventud
Antes pensaba en la vida, su inquisidora traición
Sin embargo ahora pienso en irme
E irme lejos, sin ninguna otra condición,
Me gustaría abandonar estos campos
Estos caminos de naturaleza
Y dejar de perderme en ellos
Mientras pienso en su belleza,
Imagino el bosque frondoso
El calor que me arropa
La vida interna que aquí hay
Capaz de pasar inadvertida a nuestros ojos
Solo para los que miran con detalle
Y observan las pisadas del suelo
Solo para aquellos seres inconformistas
El camino sigue entero,
A todos se nos corrompen las hojas
Y perdemos nitidez como en las fotos
Los recuerdos, mi añoranza
De los felices años veinte,
Ojalá estuviese en mi mano diseñar
Cualquier mundo mejor
Y pudiese poner con mis lápices
Un poco del color que falta,
Construiría una casita en el bosque
Una zona un tanto apartada
Sin muros ni inquietudes
Que funcionen como alambradas,
Junto a ella la pradera
Unos árboles con sombra
Ojalá mi familia entera
Quiera venir a conocerla,
Pondría un tremendo esfuerzo
En separarme de este inhóspito lugar
Tejer nuevas historias
Para poder volver a plasmar
La virtud más bella y humana
Que jamás se haya podido inventar.
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